Alemania ha estado debatiendo durante años si sus instituciones deberían usar las herramientas de Microsoft o no. El estado alemán de Hesse recientemente etiquetó el uso de Windows 10 y Office 365 en las escuelas como inseguro.

Esta decisión se tomó en medio de la preocupación del gobierno sobre la privacidad de los datos. La Oficina Federal de Seguridad de la Información cree que los datos privados de maestros y estudiantes pueden estar expuestos debido a una configuración en Office 365.

Office 365 usa una función de telemetría para recopilar datos de usuario y enviarlos de vuelta a Microsoft.

Los datos incluyen resultados de diagnóstico de software, líneas de asunto de correo electrónico o información utilizada por las herramientas de corrección ortográfica y más. Windows 10 también usa una técnica similar para recopilar datos de telemetría.

El problema es que los estudiantes no pueden dar su consentimiento para la recopilación de datos. Además, la mayoría de las veces, Microsoft no solicita el consentimiento del usuario para recopilar y almacenar información. Por lo tanto, las leyes GDPR prohíben a las empresas realizar estas prácticas ilegales.

Microsoft no es la única compañía objetivo de la Oficina Federal de Seguridad de la Información. Las soluciones basadas en la nube que ofrecen Apple y Google pertenecen a la misma categoría.

El comisionado de Hesse recomendó que las instituciones educativas utilicen aplicaciones alternativas que brinden servicios similares a nivel local.

Microsoft necesita encontrar una solución satisfactoria para resolver este problema. De lo contrario, muchos otros países europeos pueden adoptar una estrategia similar.

Es importante que las empresas que tienen acceso a dichos datos utilicen mecanismos de cifrado sólidos para evitar problemas de seguridad.